María Rojas Tobón
Lunes, 24 Septiembre 2012
Desde las 11:00 horas comenzaron a llegar los garrafones con agua de múltiples sabores, las carnitas corrieron a cuenta de la iglesia del municipio de San Vicente Coyotepec y los 100 pollos a la pastoral de la Sagrada Familia de Tehuacán, el objetivo era el mismo: Fomentar la convivencia familiar.
En esta ocasión el Seminario Menor fue abarrotado por miles de fieles que acudieron a celebrar los 50 años de la Diócesis de Tehuacán con la visita del cardenal Norberto Rivera Cabrera, quien encabezó la celebración eucarística, la cual se prolongó cerca de dos horas.
Los intensos rayos del sol y las cantos religiosos ocasionaron que por momentos algunos creyentes se dejarán vencer por el sueño, mientras algunos infantes acalorados lloraban.
Para la familia Correa este fue uno de los momentos más significativos de su creencia religiosa, el cual fue aprovechado para reunir a toda la familia y acudir a la celebración con la finalidad de reforzar su fe y su amor por Dios, además de fomentar la convivencia y los valores a cada integrante.
En esta ocasión no hubo vendedores ambulantes de comida, ya que las organizaciones de cada pastoral se encargaron de realizar cooperaciones para poder comprar lo necesario y obsequiar alimentos a las personas que acudieron al evento, fue el caso de Cecilia Cortés Rosales, misionera, quien dijo que es muy importante servir a los hermanos y con ello lograr un acercamiento con Dios.
Al finalizar la misa los miles de fieles provenientes de diferentes municipios del estado, acudieron a los estantes para recibir los alimentos preparados para la ocasión, sin importar el lugar de procedencia nadie se quedó sin recibir un platillo.
Algunos creyentes se acercaron a los puestos para obtener un recuerdo conmemorativo con costos que iban desde los $10 hasta mil 500 pesos, donde se destacaban las pañueletas, bolsas, tazas y hasta cuadros de la Última Cena.